sábado, 19 de marzo de 2016

Se fortalece el vínculo entre zika y el síndrome de Guillain-Barré

0 comentarios
 

Un análisis de muestras de sangre de un brote epidémico del virus Zika en Polinesia Francesa en 2013 y 2014 fortalece el vínculo con el síndrome de Guillain-Barré (SGB) y parece indicar una incidencia de 24 por 100.000 pacientes con zika, informan investigadores en un artículo publicado el 29 de febrero en la versión electrónica de The Lancet. Es probable que la necesidad de internamiento en la unidad de cuidados intensivos (UCI) y de apoyo respiratorio en pacientes infectados por el virus Zika que presentan SGB se sume a las dificultades de salud pública de combatir la enfermedad vírica que rápidamente se propaga, dicen.
“Este es el primer estudio en que proporciona evidencia de que la infección por el virus Zika produce síndrome de Guillain-Barré”, puntualizan Van Mai Cao-Lormeau, PhD, de la Unidad de Epidemiología de Enfermedades Emergentes, Institut Pasteur, Paris, Francia y sus colaboradores.
En un comentario editorial complementario, David W. Smith, MBBS, de la Escuela de Patología y Medicina de Laboratorio, Universidad de Australia Occidental, Nedlands, y John Mackenzie, PhD, de la Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad Curtin, Bentley, Australia Occidental, consideran que los nuevos datos son “la primera evidencia sólida de que el virus Zika puede ocasionar síndrome de Guillain-Barré”.
Sin embargo, señalan que persisten múltiples interrogantes. “Deben tomarse pequeñas precauciones en virtud de que los datos todavía son escasos y no sabemos si el virus Zika actual es idéntico al de brotes epidémicos previos, si se comportará exactamente de la misma manera en una población diferente con un fondo genético y de inmunidad diferente o si un cofactor o una infección concomitante es la causa”.
El Dr. Cao-Lormeau y sus colaboradores en Paris y Tahití llevaron a cabo este estudio para determinar si el virus Zika, con o sin infección por dengue concomitante o previa (también común en Polinesia Francesa), podría ser un factor de riesgo para el SGB.

Todos los pacientes con SGB sospechado se han remitido de manera sistemática al Centro Hospitalario de Polinesia Francesa para la confirmación mediante estudios de conducción neuromotora estándar del nervio mediano, el nervio cubital y el nervio peroneo, y para estudios de conducción nerviosa sensorial de los nervios radial y sural.
El Dr. Cao-Lormeau y sus colaboradores analizaron muestras de sangre de los 42 pacientes con diagnóstico de SGB en el Centro Hospitalario de la Polinesia Francesa durante el brote epidémico del virus Zika en octubre de 2013 a abril de 2014 en Polinesia Francesa, que fue el brote epidémico conocido más grande en esa época. Compararon estos datos con datos de dos grupos de control. El primer grupo de control (n = 98, equiparado con respecto a edad, género sexual e isla de residencia) se había tratado en el mismo hospital pero no tuvo fiebre. El segundo, el grupo sin SGB (n = 70), resultó positivo en las pruebas para infección por el virus Zika pero no tuvo síntomas neurológicos de SGB.
Los pacientes con SGB presentaron debilidad muscular generalizada (74%), imposibilidad para caminar (44%) o paralasis facial (64%). Dieciséis de estos 42 pacientes (38%) fueron ingresados en la UCI y 12 (29%) precisaron asistencia respiratoria. La mediana de las hospitalizaciones fue 11 días para todos los pacientes con SGB y 51 días para los ingresados en la UCI. Todos fueron tratados con inmunoglobulinas y uno se sometió a plasmaféresis, pero hacia los tres meses después del alta solo 24 (57%) había recuperado la capacidad para caminar sin asistencia.
Ninguno de los pacientes con SGB tuvo viremia por zika cuando se efectuó la hospitalización, pero 88% informó haber tenido una enfermedad transitoria una mediana de 6 días antes del inicio de síntomas neurológicos. Así mismo, 41 de 42 pacientes con SGB (98%) fueron positivos para el virus Zika con base en la reacción en cadena de la polimerasa con transcripción inversa en comparación con 35 (36%) de los 98 pacientes del primer grupo de control (oportunidades relativas [OR]: 59,7, p< 0,0001). Todos los pacientes con SGB (100%) tuvieron anticuerpos neutralizantes contra el virus Zika, lo mismo que 54 (56%) del primer grupo de control (OR: 34,1; p < 0,0001).
El antecedente de fiebre de dengue no fue significativamente diferente entre los tres grupos de pacientes, y los investigadores llegaron a la conclusión de que el dengue no aumentaba el riesgo de SGB en pacientes infectados por zika.
Los autores señalan: “Los resultados de nuestro estudio apoyan el hecho de que el virus Zika debiera sumarse a la lista de microorganismos patógenos que pueden causar SGB. Dado que el virus Zika se está propagando con rapidez por el continente americano, los países con riesgo necesitan estar preparados para contar con la capacidad adecuada de camas para cuidados intensivos a fin de atender a los pacientes con SGB”.
Los editorialistas señalan que debe confirmarse y vigilarse muy bien la tasa estimada de SGB en pacientes con zika para garantizar que cualquier incremento evidente durante la epidemia de zika actual refleja un incremento real más que un aumento de la notificación.
También señalan que dado que la mayoría de los pacientes con SGB en el estudio actual informaron tener síntomas de zika antes del inicio de SGB, y casi todos los casos de zika son asintomáticos, el riesgo de SGB se puede agrupar en pacientes con infecciones sintomáticas por zika.
El estudio fue financiado por Labex Integrative Biology of Emerging Infectious Diseases, S éptimoPrograma Marco de la Unión Europea PREDEMICS y la Wellcome Trust. Los autores han declarado no tener conflictos de interés económico pertinente.



Referencias

  1. Lancet. Publicado en versión electrónica el 29 de febrero de 2016.

Leave a Reply